viernes, 24 de junio de 2011

Sale el sol...

Sale el sol entre nubarrones cuando lo sentimos aunque no lo veamos, cuando lo llevamos dentro y lo reflejamos.
Cuando dejamos de ver la botella en todas las posiciones y nos animamos a llenarla; cuando tras un reto conseguido nos espera otro aún mayor y apasionante en la rampa de salida.
Sale el sol cuando borramos la palabra fracaso de la agenda y la sustituímos por aprendizaje; cuando la ilusión es el tobogán por el que nos deslizamos, sea cual sea el destino; cuando en la lotería a la que jugamos cada día nos tocó algún sueño cumplido.
Sentimos el sol cuando nos atrapa una mirada y los arropa una sonrisa; cuando el calor traspasa la roca que somos y lo guarda para otros. Cuando lo que nos amarga no es más que parte del mobiliario, de la decoración de una vida que podemos cambiar de sitio en cualquier momento. Cuando tristezas o decepciones se quedan entre las sombras que arrastramos para darnos un nuevo impulso.
Sabemos que ha salido el sol cuando vemos la luz de la comprensión en lo que antes era inexplicable, cuando entendemos que todos los que nos rodean tienen sus propias razones para ser y estar a nuestro alrededor.
Cuando un lunes abres los ojos, respiras, y estás deseando que amanezca el martes, para ti, ha salido el sol.

No hay comentarios:

Publicar un comentario